La indicación de estado es fiel al principio de "los dos sentidos": señaliza tanto óptica como acústicamente qué función está activada en ese momento. De este modo, las personas sordas o con deficiencias auditivas reciben respuestas claras del interfono.
El timbre ha sonado: La pantalla de estado confirma la llamada de puerta por medio de una señal óptica.
El símbolo de boca indica: ahora es posible hablar.
Se acciona la apertura de puerta: la puerta puede abrirse
El cuarto símbolo indica: en la actualidad no se puede establecer la conexión.